YOGA TIBETANO y DOCTRINAS SECRETAS: LIBRO II : LA SUCESIÓN DE LOS GURÚS. * EL SENDERO NIRVÁNICO; EL YOGA del GRAN SÍMBOLO. * PLEITESÍA. * PROEMIO. * INSTRUCCIONES PRELIMINARES. *El refugio, la resolución y la unión con los Gurús. * Las siete posturas corporales. * Los efectos de las siete posturas corporales.
IV. LA SUCESIÓN DE LOS
GURÚS.
La Sucesión hindú, u
original, de los Gurús de las doctrinas del Gran Símbolo, que, en
la Pleitesía de nuestro texto, se llama Dinastía Blanca [o Linaje],
como lo hemos observado, que transcurre desde el siglo I antes de
Cristo hasta la época de Marpa, que fundó la rama tibetana de
aquélla, durante la última mitad del siglo XI de nuestra era. Por
lo tanto, existe una historia ininterrumpida de la enseñanza, en una
forma u otra, durante unos dos mil años. De acuerdo con la
tradición de los kargyüpas, esta historia se extiende asimismo, en
relación inversa, hasta la era pre-cristiana, durante considerables
siglos.
Marpa, el primero de los
Gurús tibetanos de la Sucesión, pasó, según se dice, dieciocho
años como shishya en la India, y consultó cerca de cien
ilustrados filósofos indios. Su versión tibetana del Gran Símbolo
debe, por lo tanto, haberse basado en el más autorizado texto
disponible en su tiempo.
No podemos determinar si
la Sucesión hindú de los Gurús de la Escuela de Gran
Símbolo sobrevivió a las invasiones extranjeras y levantamientos
sociales y religiosos resultantes, que tuvieron lugar entre los días
de la estada de Marpa en la India y nuestra propia época. Bien
puede ser que el texto de El Gran Símbolo se haya perdido en su
tierra de origen, como muchos otros textos hindues, y sobreviva
solamente en las traducciones tibetanas.
La rama tibetana de la
Dinastía Blanca de los Gurús, es, filosóficamente
considerada, distinta de todas las otras Sucesiones o Escuelas
tibetanas; comúnmente se la conoce como Kargyüpa, que significa:
“Seguidores de la Tradición Oral”. Desde la época de Marpa
hasta ahora la norma del Gran Símbolo de la intuición mística
(tibetano: Ta-wa) ha sido fundamental en la filosofía
kargyüpa en los sistemas de las prácticas ascéticas.
Milarepa, sucesor de
Marpa, fue un asceta errante, que vivió durante muchos años como
ermitaño en cavernas, en medio de las más insólitas soledades de
las elevadas montañas tibetanas, revestidas de nieve, mediante el
dominio del yoga de El Gran Símbolo, desarrolló
extraordinarios poderes de la más prodigiosa índole, como lo
refiere su Biología. A Milarepa, el místico santo venturos,
más que a Marpa, erudito-transmisor de la enseñanza hindú, los
kargyüpas deben su origen como linaje de yogins prácticos
que hoy en día todavía florece.
Además, de sus dos más
prominentes discípulos, Dvagpo-Lharje y Rechung, se atribuye a
Milarepa haber formado otros ocho discípulos dentro del nivel de
adeptos del yoga; otros 108 dentro del dominio de la ciencia
de generar calor-vital (tibetano: Tummo), de modo que vestidos
tan sólo con ropa de algodón, que usan todos los yogins
kargyüpas, eran inmunes al riguroso frío del invierno tibetano; y
haber puesto a otros numerosos discípulos, varones y mujeres en el
Sendero de al Iluminación Bódhica. Con las palabras de
Rechung: “En virtud de su poderosa gracia y buenos deseos dejó
tras de sí santos discípulos, tan numerosos como las estrellas del
cielo. La cantidad de quienes jamás han de retornar a la existencia
sangsárica [o mundanal] es como los granos de arena sobre a Tierra.
Son innumerables los varones y mujeres que entraron en el Sendero”.
Dvagpo-Lharje, como ya se
expresó antes, en el Libro I, se convirtió en el sucesor de
Milarepa y en el tercero de los gurús humanos de la Dinastía
Kargyüpa. Desde allí a Sucesión de los Gurús Blancos continuó
en número de 24 en directa sucesión desde Marpa, hasta el Gurú
Padma-Karpo, autor de nuestro texto de El Epítome del Gran Símbolo,
Padma-Karpo es más conocido en los registros de la Jerarquía
Kargyüpa por su nombre iniciático, “La Gema que Posee el Poder de
la [Divina] Palabra”” (tibetano: Ngag-Dvang-Nor-bu, que se
pronuncia: Ngag-Wang-Nor-bu).
Como Jefe de la Jerarquía
de la Sucesión Blanca de los Gurús, también conocida como Sucesión
Kargyüpa, indudablemente Padma-Karpo tuvo acceso a los diversos
textos manuscritos tibetanos de El Gran Símbolo, junto con
sus enmiendas y comentarios, que se habían acumulado durante el
curso de los seis siglos pasados desde el tiempo de Marpa. De allí,
como el Colofón de nuestros textos lo hace conocer, Padma-Karpo, de
acuerdo con la voluntad de su real discípulo, el Rey Kashmiri,
extrajo lo esencial y agrupó El Epítome del Gran Símbolo
exactamente como lo tenemos.
De acuerdo con fiables
traducciones, el Rey fue ante Padma-Karpo como peregrino, y
renunciando a su reino y al mundo, como lo hizo el Príncipe Real
Siddhartha que se convirtió en Buda Gautama, fue aceptado por
Padma-Karpo como shishya en periodo de prueba. Después que
el real asceta pasó una cantidad de años en el estudio y prácticas
yóguicas bajo el control del Gurú, retornó a
Kashmiren como monje budista, y parece que allí estableció una
jerarquía kashmiri de la Sucesión Blanca. El extinto lama Kazi
Dawa Samdup opinaba que posiblemente exista alguna referencia a dicha
Sucesión Kashmiri en los documentos preservados en e Monasterio
Himis, en Ladak; este monasterio tiene relación histórica con la
Escuela Kargyüpa a través de las escuelas disidentes de los
kargyüpas que evolucionaron en Bhutan.
Siguiendo nuestro texto,
el sitio del retiro yóguico de Padma-Karpo se hallaba en el extremo
Sud del Tíbet, cerca de los fronteras de lo que actualmente es el
Estado de Bhutan. Allí, también el Rey efectuó probablemente su
valioso donativo de más de veinte medidas de azafrán traídas, sin
duda, desde Kashmir, la Tierra del Azafrán.
Hoy en día, Padma-Karpo es
la autoridad principal relativa a la tradición tántrica de la
Escuela Kargyüpa. Sus escritos comprenden obras corrientes sobre
astrología, medicina, gramática, historia, rituales, arte,
filosofía, metafísica, y ocultismo. Se le atribuye la recopilación
y edición de unos cincuenta y dos a cincuenta y ocho volúmenes.
También fue un notables poeta, y sus rapsodias místicas célebres
en todo Bhutan, se publicaron en una obra popular llamada Rosario
de los Himnos Divinos (tibetano: Rdo-rje-glu-Horeng, que
se pronuncia: Dorje-lu-Hteng). Fue contemporáneo del Quinto
Dalai Lama que falleció en 1680.
En el tiempo de
Padma-Karpo, el pequeño reino himaláyico de Buthan era una tierra
menos conocida aun que el Tíbet. Sus habitantes indígenas se
hallaban en una condición cultural baja y, en gran parte, entregados
al bandolerismo y las contiendas intestinas. Luego, hacia el final
del siglo XVII, llegó a Buthan, procedente del Monasterio Ralung del
Tíbet, un venturoso gurú de la Sucesión Blanca que estaba
destinado a continuar a llevar la afortunada conclusión la
purificación espiritual iniciada por Padma-Karpo. Se dice que su
destacada santidad brillaba como un sol en medio de la oscuridad. En
virtud de sus inusuales poderes religiosos, ganó tal ascendiente
sobre los bhutaneses que lo aceptaron alegremente como su primer
Dharma Rája, o Rey Divino, y fue conocido por ellos como [El
del] Victorioso Poder de la Palabra, El Irresistible Destructor de la
Ilusión (tibetano: Ngag-dvang-Rnam-rgyal-Bdud-hjoms-Rdor-je, que
se pronuncia: Ngag-wang-Nam-gyal-Dü-jum-Dor-je). A través de
él, a su vez, y de allí hasta Norbu el Gurú Ermitaño, las
enseñanzas del Gran Símbolo prosiguieron fomentándose y
transmitiéndose.
Tal es, pues, la
interesante historia de El Gran Símbolo, y de nuestro Epítome
de aquél, así como también de la Sucesión Blanca de los Gurús,
por los que estas enseñanzas fueron transmitidas a nosotros. El más
ferviente deseo del traductor consistió en que todos los que leyeran
este Libro con buena disposición fuesen retribuidos, aunque fuere a
pequeña escala, participando de la herencia espiritual que él
ofrece, para así entrar en el Sendero y, en última instancia,
alcanzar la Meta Suprema.
PALABRAS DE BUDA
CORRESPONDIENTES A CANON PALI.
“Así como en
el Gran Océano, o discípulos, no existe sino un solo sabor, el
sabor de la sal, de igual manera, oh discípulos, en la doctrina que
te predico, no existe sino un sólo sabor, el sabor de la
Liberación”.
“He aquí este
abigarrado mundo, sumido en la ignorancia, lleno de no-emancipados
seres amantes del placer”.
“Si un hombre no se
esforzase en toda ocasión, ni existiese por otro; ni viviese por
amor a los demás, en verdad no vive la vida santa”.
“La Rueda está
rota; la Ausencia de Deseo se ha alcanzado.
El lecho del río
está seco; no fluye el agua;
la rueda rota no
rodará ya más.
Este es el fin de
Sufrimiento”.
De Udana
(Según versión inglesa del
Mayor General D. M. Strong).
EL SENDERO NIRVÁNICO;
EL YOGA del GRAN
SÍMBOLO.
[PLEITESÍA]
1) ¡Pleitesía a la Preciosa
Dinastía Blanca [de los Gurús]!
[PROEMIO]
2) Aquí, en la exposición de
esta Guía, llamada El Yoga del Gran Símbolo Simultáneamente
Nacido1, pretende establecer la continuidad
ordinaria del conocedor cara a cara con la pura Sabiduría Búdica2,
están las instrucciones preliminares, el tópico esencial, y la
conclusión.
1 – Cuando, en virtud de
haber practicado la meditación yóguica, se estableció unión
de la mente humana y la auténtica naturaleza de la mente, o entre la
conciencia humana normal y la conciencia cósmica supranormal, el
hombre alcanza la verdadera comprensión de sí mismo. Comprender
intuitivamente que el Conocedor y todos los objetos del conocimiento,
o todo el conocer, son inseparablemente una unidad; y simultáneamente
con esta captación nace el Gran Símbolo, que ocultamente significa
esta iluminación espiritual. Como la piedra filosofal, el Gran
Símbolo purga a la mente de la impureza de la Ignorancia (Avidyá);
y lo humano se transmuta en su auténtica naturaleza mediante la
alquimia espiritual del yoga.
2 – Nuestro texto se denomina
“Guía” pues dirige al peregrino religioso por el Sendero que
conduce a la completa Iluminación y Emancipación Nirvánica.
Cuando el yo inferior fue absorbido en el yo superior, puede
interrumpirse la ilusión de la personalidad, y es entonces cuando se
concreta la continuidad del Conocedor, de carecer de principio y fin,
de ser eterno en unicidad con lo Omnisciente. Es de esta manera que
lo humano se eleva más allá y se pone cara a cara con la pura
Sabiduría Búdica.
PARTE II: INSTRUCCIONES
PRELIMINARES.
3) Las instrucciones
preliminares son temporales y espirituales.
4) Las instrucciones
preliminares, que se hallan en primer término, se aclaran en otra
parte3.
3 – Las instrucciones
temporales son las transmitidas mediante sermones tendientes a guiar
al lego hacia una senda superior de la vida. Una vez que se toma la
decisión de dar el primer paso en el Sendero, el discípulo ya no
necesita instrucciones temporales ni exotéricas, y empieza a
adquirir las espirituales o, en relación con la no-Iluminada
multitud que es mentalmente incapaz de comprenderlas, las
esotéricas.
[El refugio, la resolución
y la unión con los Gurús]
5) En las instrucciones
espirituales, que siguen las pasos iniciales consisten en empezar con
el Refugio y la Resolución y elevarse hasta a Unión con los
Gurús4.
4 – Esta parte de as
instrucciones pueden ajustarse, si es necesario, a las inclinaciones
religiosas del discípulo. Un yogin hindú, por ejemplo
probablemente sustituirá por el ritual budista, aquí implícito, un
ritual similar de su propia escuela, o no usaría ninguno, como hizo
un yogin Brahmin en Rikhikesh sobre el Ganges Superior, de
quien recibí alguna guía yóguica. Siendo el más noble
ejemplo histórico de Quien ganó la Suprema Victoria, Buda Gautama
es correctamente considerado por los budistas como el Refugio y la
Guía, en Quien el discípulo en el inicio del Sendero, que El Mismo
holló, hará reposar su fe. Para el neófito la fe es el primer
requisito esencial. Sin fe de que existe una Meta por alcanzar,
sería imposible el paso inicial en el Sendero. Por lo tanto, la
regla preliminar consiste en que el neófito debe, en el inicio mismo
de su viaje espiritual, dar forma apropiada a la expresión de esta
fe. Para conformar esta regla, el budista del Tíbet empela un
riitual quíntuple, a saber:
-
El Refugio en su larga forma tibetana. Su parte primera y esencial, que se parece al breve Triple Refugio del Budista Sureño, es así:- “Mediante la intercesión del Gurú, nosotros (i. e. todos los seres) tomanos refugio en el Buda.- Tomamos refugio en el Dharma.- Tomamos refugio en la Sangha”.
-
La resolución en su forma reducida: “Yo resuelvo convertirme en Buda a fin de capacitarme para ayudar a todos lo seres sensibles a alcanzar el Estado Búdico”.
-
La Meditación sobre el Dhyani Buddha Vajrasattva (tibetano: Dorje-Sempa); y la Recitación del Mantra de las Cien Silabas, para la purificación del karma maligno.
-
La Ofrenda del Mandala en sacrificio místico; que, a este respecto, significa la renuncia al mundo y al Sangsára como un todo.
-
La unión con los Gurús, visualizando los Gurús sentado en postura yóguica y en linea perpendicular, uno directamente sobre el otro, el gurú humano cerniéndose sobre la cabeza del discípulo y los demás en su debido orden de sucesión del linaje, con el gurú primordial, Varjadhara (tibetano: Dorje-Chang) en la cúspide.
[Las siete posturas
corporales]5
“Endereza el cuerpo y
asume la Postura Dorje7;
La Unidireccionalidad de
la mente es [el sendero que conduce] al Gran Símbolo”.
7) [De modo acorde], coloca
los pies en la Postura Buda. Coloca las manos a nivel y equilibras
debajo de ombligo9. Endereza la columna vertebral.
Echa hacia afuera el diafragma10. Dobla el
cuello en forma de gancho, la barbilla presionando
[ligeramente] precisamente contra la nuez de Adán11.
Coloca la lengua hacia arriba contra el paladar12.
8) Ordinariamente el intelecto
es controlado por los sentidos. La vista es la que principalmente
controla. [Por lo tanto], sin pestañear ni mover los ojos,
concentre su vista a una distancia de unos cinco pies y medio13.
9) Estas (i. e. las siete
posturas descriptas antes) se llaman los Siete Posturas de Vairochana
(i. e. las siete medios de comprender los procesos psico-físicos].
Constituyen e método quintuple de inducción d meditación profunda
por medios físicos14.
5 – En sánscrito se conocen
como ásanas. Anulan, o detienen, ciertas fuerzas o
corrientes corporales, y en gran medida ayudan en la práctica del
yoga. También vuelven al cuerpo flexible y capaz de gran
resistencia, eliminan las condiciones físicas indeseables, curan las
enfermedades, y calman el funcionamiento orgánico y la mente.
6 – Texto:
Rnam-snang-ngön-byang (se pronuncia: Nam-nang-ngön-jang),
título de un tratado tibetano sobre yoga, encaminado a guiar
hacia la comprensión de todos los fenómenos como ilusorios.
Vairochana (tibetano: Nampar-nangzad) es el Dhyani
Buddha del Centro. Aquí simboliza al Dharmadhátu, o Sabiduría
Fundamental. Poniéndose uno en unión espiritual con Vairochana, se
comprende la verdadera naturaleza de la existencia.
7 – El dorje es el cetro
lamáico; y la Postura dorje (o Asana Dorje) es una postura de
equilibrio, tanto mental como físico, simbolizado por la armonía
del dorje.
8.- “Lit: Coloca los pies en
la postura del dorje”, i. e. la postura de piernas cruzadas con la
que comúnmente se representa a Buda, llamada por los hindúes
postura de loto (sánscrito: Padmasana).
9.- En esta postura, que es a
de meditación, las manos se mantienen aiertas, con las palmas hacia
arriba y horizontales, precisamente debajo del nivel del ombligo, el
dedo medio de una mano tocando e de la otra en la punta y los
pulgares doblados en la base de los dedos indice.
10.- O: “Echa el pecho hacia
afuera, con los hombros hacia atrás”.
11.- Lit: “el nudo”, i. e.
la “nuez de Adán”.
12.- Swami Satyananda,
mencionado en la Introducción, considera este pasaje incompleto en
sus directivas. A modo de crítica, escribe : “La lengua en
realidad debería colocarse, no contra e paladar, sino hacia arriba
de manera tal que las formaciones en gancho donde empiezan las
aberturas nasales internas, obstruyéndolas al presionarlas. Esta
práctica se conoce como Khechari Mudra. Sin ella el yogin no podría
concretar el estado de tranquilidad cuando practica asana;
pero hasta que el principiante no haya progresado algo en el yoga,
no ha de emplearse el Khechari Mudra”. Para practicar el Khechari
Mudra, primero ha de entrenarse la lengua; y en la mayoría de los
casos, alargarse gradualmente. El alargamiento se consigue con
mensaje y estiramiento de la lengua. También es, por lo general,
necesario para la mayoría de los yogins que desean practicar
este Mudra, cortar, poco a poco, en un lapso de meses, la membrana de
la superficie inferior de la lengua, que mantiene la lengua en el
centro, conocida como fraenum linguae. Los yogins, por este
medio, como los animales que hibernan cerrando sus aberturas nasales
internas con su lengua, adquieren la facultad de suspender los
procesos vitales del cuerpo. Esto da por resultado la conservación
de la energía y la longevidad, pero en sí mismo no conduce al
avance espiritual. El cortocircuito yóguico de las funciones
puramente físicas y animales del cuerpo ha de utilizarse únicamente
como ayuda para la conquista del yo inferior.
13.- Lit: “a la distancia de
un yugo”. El yugo es una medida hindú basada en el ancho del yugo
de un par de bueyes; la distancia es de aproximadamente cinco pies y
medio.
14.- El párrafo que sigue
expone el método quíntuple; y el párrafo 11, siguiente, expone el
resultado obtenido.
[Los efectos de las siete
posturas corporales].
10) La postura de piernas
cruzadas regula la inspiración15. La postura de
equilibrio iguala el calor-vital del cuerpo16. El
enderezamiento de la columna vertebral junto con la expansión de
diafragma regulan el fluido nervioso que se difunde por el cuerpo17.
La inclinación del cuello regula la expiración18.
La colocación de la lengua contra el paladar junto con la fijación
de la vista causan la fuerza-vital19 para entrar en
el nervio-medio20.
11) Habiendo entrado de ese
modo los cinco “aires” en el nervio-medio, también penetran en
él los otros “aires21” de control-funcional, y
surge la Sabiduría de la No-Cognición, también conocida como
tranquilidad corporal, o inmovilidad del cuerpo, o cuerpo que mora en
su estado natural22.
15.- Lit: “el aire que se
mueve hacia abajo”:
16.- Lit: “el aire que iguala
el calor”.
17.- Lit: “el aire llamado
difusor”.
18.- Lit: “el aire que se
mueve hacia arriba”.
19.- Lit: “el aire que
mantiene la vida”. En casa una de estas cinco referencias, “aire”
se relaciones con una energía de control funcional del cuerpo, para
lo que no existe exacto equivalente en el lenguaje de la fisiología
europea. En sánscrito se conoce como Prana.
20.- Estos son: control de los
procesos de digestión, secreción, circulación, extiende a través
del centro de la columna vertebral. De él salen ramificaciones de
nervios psíquicos subsidiarios que distribuyen en cada uno de los
centros psíquicos (sánscrito: chakra) la fuerza vital, o
pránica, de la que, en última instancia, dependen todos los
procesos psico-físicos.
21.- Estos son: control de los
procesos de digestión, secreción, circulación transmisión de
impulsos metales, sensaciones, etc.
22.- El estado natural del
cuerpo, como el de todas las cosas, es un estado e perfecta
tranquilidad.
Dr.Walter Yeeling Evans-Wentz, editor.
Kazi Dawa Samdup, traductor.
Los méritos son ofrecidos a todos los seres para que alcancen la Iluminación en esta vida.
Qué todos los seres sean felices.
Qué se liberen del sufrimiento.
Qué no se separen nunca de la felicidad.
Qué permanezcan en la gran ecuanimidad.
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