YOGA TIBETANO y DOCTRINAS SECRETAS. LIBRO V. CHÖD. 1. Los objetos necesarios para la práctica del rito. 2. Lugar e imágenes mentales prescriptos. 3. Directivas para el yogin. 4. La visualización del mandala.5. La fiesta mixta, roja y negra.
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1. Los objetos necesarios para la práctica del rito.
Inmediatamente
después de la “Pleitesía a la Profundamente Versada en el
Conocimiento del Espacio de la Verdad, la Dama que concede la Dicha,
la Conquistadora del Lago62”,
y de una introducción, compuesta de cinco versos, referidos a la
“Doctrina de la Gran Perfección”, del Gurü Padmasambhava, se
describe a continuación las cosas necesarias para que el yogin
pueda practicar el Rito Chöd.
“Para
vencer a los orgullosos [elementales] con la propia apariencia
majestuosa,
un
cuero con las garras intactas, de una bestia de presa;
una
tienda en miniatura, para simbolizar las propias aspiraciones
elevadas63,
un
tridente, para simbolizar los propios objetivos ascendentes;
una
trompeta de fémur humano, para controlar a duendes y demonios;
un
damaru64,
para someter a las apariencias;
una
campana, con campanillas fijas en ella, para dominar a las
Matrikas65,
una
banderilla, hecha con angostas tiras de piel de tigre y leopardo, y
cabello
humano,
trenzado66;
62.-
Texto: Tsho-gyal-ma,
“Conquistadora del Lago”, nombre, probablemente iniciático, del
principal discípulo femenino del Tíbet del Gurú Padmasambhava.
Sus discípulos la llamaron ·la Dama que Concede la Dicha”, en
reconocimiento de su poder yóguico de acordar
la Felicidad de la Iluminación; y el Gran Gurú la llamó: “Única
Profundamente versada en el Conocimiento del Espacio de la Verdad”.
Otra famosa discípula del Gurú fue una princesa del Punjab. Por
tanto, ni en budismo tibetano ni en el hindú, existe discriminación
en cuanto al sexo; y la mujer comparte con el hombre, la gloria de la
Fe, y el elevado privilegio, si está espiritualmente calificada, de
ayudar a su propagación.
63.-
La tienda es generalmente de algodón, a menudo adornada con las
sílabas AUM, AH, HUM marcadas en ella con cinta o pintura, o, de
acuerdo con la señora David Neel, “recostadas en material azul y
rojo y cosidas en los tres lados cerrados”.
64.-
El damaru
tibetano está hecho con las porciones superiores de dos cráneos
humanos unidos en su ápice para formar un doble tambor parecido a un
reloj de arena, cuyas superficies sonoras son de piel humana. El
damaru
lo usan, como si fuese un tamboril, los lamas esotéricos y místicos
pues sus partes simbolizan la transitoriedad del la existencia
humana. Unas cuerdas anudadas, que cuelgan flojamente
del instrumento, chocan las superficies sonoras cuando se lo agita y
la hace resonar. Otra clase de damaru,
hecho con materiales no humanos, lo emplean los hindúes en ritos
relacionados con el culto de Siva.
65.-
Las Matrikas,
o Diosas-Madre, comprende aquí numerosas órdenes de Dakinis y
deidades femeninas [enojadas].
66.-
Esta banderilla simboliza el sometimiento del orgullo.
2.
Lugar e imágenes mentales prescriptos.
“Luego,
en un lugar [solitario], que inspire miedo,
y
libre del temor de ser aterrorizado por duendes y demonios,
o
por cualquiera de las influencias [o motivos] de las
Ocho
Ambiciones Mundanas67,
uno
ha de estar imbuido de la virtud de los Cuatro Ilimitados Deseos68;
[y
de esa manera] domina
toda aparición [que surja de la mente].
“Si
a esta altura uno fracasara en salvaguardarse por medio de las
imágenes
[o visualización] mentales,
sería
como dar al enemigo el secreto de la propia fortaleza.
Sería
como dar al enemigo el secreto de la propia fortaleza.
Por
lo tanto, mantén con energía la claridad del intelecto,
y
pronunciando ¡Phat! piensa que dentro de tu corazón,
un
dorje
de nueve puntas, hecho de hierro fundido por un rato,
irrompible
y balanceado, pesado y fuerte,
entiendo
resplandores llameantes,
cae
con la potencia de un rayo, cualquiera que sea el lugar
lugar
donde uno mentalmente lo proyecte.
Contra
los duendes locales y espíritus antagónicos con su secuaces,
tomándolos
impotentes para huir o ser retirados.
Tomándolos
impotentes para huir o ser retirados.
Piensa
que así ellos se detienen y acobardan, su heroica y
soberbia
naturaleza dominada69.
“Luego,
dejando a un lado todos los convencionales sentimientos
de
vergüenza o los comunes pensamientos hipócritas,
pero
manteniendo la confianza devocional con celo y energía,
ejecuta
los cuatro exaltados pasos,
pon
en movimiento la vigorosa marcha [nacida] de la
imperturbable
fe en la Doctrina [de la Perfección].
Y
a los malignos espíritus vagabundos de la localidad,
condúcelo
a todos antes ti como un grupo de ovejas o cabras,
obligándolos
sin que puedan resistir, al sitio que inspira temor.
Y,
tan pronto llegaron allí,
con
paso de energía y fuerza superabundantes,
aférralos
a todos por la piernas,
y
hazlos girar sobre tu cabeza tres veces,
y
piensa que los tiras al suelo,
mientras
te afirmas en esta visualización,
arroja
el cuerpo y la tienda en miniatura al suelo, con energía70.
“[Así]
por más grande e influyentes que sean los duendes
y
demás seres espirituales,
casi
con seguridad serán controlados y mantenidos en pasividad71.
Más,
si la solida devoción del yogin fuera débil,
ha
de practicar estas imágenes mentales gradualmente,
de
acuerdo con su coraje72”.
67.-
Las Ocho Ambiciones Mundanas
[los ocho dharmas mundanos]
son: esperanza
de lucro y miedo a la perida; esperanza de placer y miedo al dolor;
esperanza de fama, renombre o gloria y miedo a la difamación;
esperanza de alabanza y miedo al descrédito; [se
pueden resumir en dos actitudes fundamentales: esperanza y miedo].
Este y el verso siguiente representan los agregados puramente
budistas de un culto originalmente prebúdico.
68.-
Los
Cuatro Deseos Ilimitados, también conocidos como la Fórmula de los
Buenos Deseos [los
cuatro ilimitados, inconmensurables],
cuya virtud debe de tal modo llenar la naturaleza del yogin
que emane de él, como compasión divina, hacia todos los no
iluminados duendes, demonios y elementales, son como sigue:
“Que
todos los seres sensibles estén dotados de felicidad y de las causas
de felicidad;
que
cada uno de ellos se separe del sufrimiento y de las causas del
sufrimiento,
que
todos disfruten de suprema dicha desprovista de sufrimiento,
que
sean liberados del apego y del odio,
de
modo que sus Ocho Ambiciones Mundanas, sean abatidas y allanadas [o
vencidas]”.
69.-
El animismo primitivo resulta aquí particularmente relevante por la
referencia al uso mundial del hierro como tabú animismo. Al igual
que entre el campesinado celta y de otros países de Europa, que
recurren a trozos de hierro, que colocan en la cuna del infante o
atan a una vaca, como protección contra hostiles influencias
espirituales de seres al estilo de hadas, también es común
en el Tíbet, al igual que en toda el Asía, Polinesia, África, y en
ambas Américas, este extraño
método de protección de los mañ dispuestos seres del reino
invisibles.
Por ser algo que sobrevive desde prehistóricas épocas de la larga
historia de hombre, sugiere también que la mente única del hombre
trasciende en sus afanes las barreras artificiales
de
clima, raza y credo.
70.-
Para dar mayor claridad a la visualización, la piel y la tienda,
que, aparentemente, simbolizan reunidas
criaturas espirituales, y, que durante todo ese lapso el yogin
sostuvo en sus manos, han de hacer girar tres veces sobre la cabeza,
lanzándolas luego hacia abajo, con gran fuerza, contra la tierra.
71.-
Luego que se controlan y mantienen en calma
las diversos órdenes de seres espirituales, o que se los somete a la
disciplina, se los obliga a obedecer las órdenes del mago-yogin,
secundándolo.
72.-
Completamente
aparte
de los fenómenos psíquicos que se dice surgen de estas prácticas
yóguicas,
lo fantástico del sitio en el que se celebra el “corte” y el
carácter de las visualizaciones, son en sí por demás suficientes
como para probar el valor del más impávido de los yogins.
De modo acorde, el yogin
ha de familiarizarse gradualmente, tanto mental como físicamente con
el medio y las imágenes simbólicas antes de la aplicación práctica
del Yoga
del No Ego.
3.
Directivas para el yogin.
Tras
esto, el tema de los manuscritos es esencialmente el mismo. Aparte
de unas pocas variaciones ortográficas, no se advierten importantes
diferencias entre los dos textos, salvo en que en el manuscrito más
grande las directivas para el yogin son más detalladas y la
Diosa de la Sabiduría que Todo lo Realiza es suplantada por la Diosa
de los Misterios tibetano: Sangwa Yeshé-Khahdoma). De esa manera,
en el manuscrito ahora en consideración, luego de la estrofa que
describe la danza sobre la cabeza del Vampiro de la Estupidez, siguen
estas directivas:
“Habiendo
hecho esto, entonces lo que se llama la ejecución de la
danza
se realiza sin ningún objetivo en particular73,
luego
viene el armado de la tienda74.
Y
habiendo dejado postrados de espaldas a todos los duendes y
espíritus
malignos de la localidad,
piensa
que a través de los cinco miembros [i. e. las dos piernas,
los
dos brazos y la cabeza] de su cuerpo,
lanzas
el rayo y se desplaza traspasando de lado a lado al ser”.
Luego,
tras
la transfixión [acción
de herir pasando de parte a parte
], detallada en una sucesiva
estrofa del manuscrito, se dan estas directivas:
“Habiendo actuado
de esta manera, no pienses para nada en
estos tres: seres humanos
(incluido tu mismo), espíritus
benéficos, y espíritus
malignos,
y mantén
tu mente en un estado de quietud;
luego, tras haber reconocido
[o comprendido la naturaleza
de los duendes y demás
seres espirituales,
ha de cumplirse el [rito del
ofrecimiento] de tu cuerpo75”.
73.-
Ordinariamente, una danza se baila por placer o para evidenciar
agilidad, pero en esta danza no tiene lugar la mundanalidad, por eso
se dice que ha de bailarse son ningún objetivo particular, o
mundano. Y en el resto del ritual, después de la danza rítmica de
las cinco estrofas de las Cinco Direcciones, el carácter parece
variar o ser menos regular y más desprovisto del propósitos. El
budismo prohíbe el baile, la música y todas las ejecuciones
mundanas.
74.-
Mientras se arma la tienda, el yogin debe visualizar como si
fuese un espíritu postrado (que simboliza su propio cuerpo físico,
representante del Egoísmo), e imaginar que cada estaca, cuando la
clava en el piso, es un rayo (o lanza mágica) de hierro, que
atraviesa una pierna a un brazo o la cabeza del postrado espíritu,
traspasándolo de lado a lado sin que se mueva. En el manuscrito más
pequeño, son las visualizadas Dakinis las que llegan con lanzas y
traspasan de lado a lado los cuatro miembros de los Elementales del
Egoísmo.
75.-
El rito ha de cumplirse por medio de las tres clases de seres
referidos a: a) seres humanos, incluido el yogin; b)
seres espirituales benéficos, o dioses, que han de adorarse con loas
y ofrendas; c) espíritus malignos, o elementales, que han de
ser apartados de sus malas sendas mediante el amor manifiesto en el
ritual, volviéndose su hostilidad en amistad mediante el don del
cuerpo carnal.
4.
La visualización del mandala.
Antes del ofrecimiento del
sacrificio vienen esta interesante visualización, que falta en el
manuscrito más pequeño:
“Luego, en el ofrecimiento
del círculo de ofrendas,
imagina, que la parte central
[o columna vertebral] de tu
cuerpo es el Monte Meru,
que los cuatro miembros
principales son los Cuatro Continentes76,
que los miembros menores son
los Subcontinentes77,
que la cabeza son los Mundos
de los Devas,
que los dos ojos son el Sol y
la Luna,
y que los cinco órganos
internos78 constituyen todos los
objetos de riqueza y goce
entre los dioses y los hombres”.
Tras el ofrecimiento del
mandala en señal de adoración, se orienta al yogin de la
manera siguiente:
“Habiendo hecho esto,
absorbe en ti mismo
mentalmente los
[visualizados] objetos del culto,
y mantén tu mente en el
equilibrio [o quietud]
del estado de no dualidad79”.
76.-
Estos son nombrados antes, en las primeras cuatro estrofas de la
Danza de las cinco Direcciones, en el texto del manuscrito más
pequeño. La quinta Dirección, o Centro, se refiere al punto central
del Cosmos, centro de gravedad, simbolizado por el Monte Meru; y
aquí, en concordancia con el Kundalini Yoga se representa más
reducido con la columna vertebral.
77.-
A cada uno de los Cuatro “Continentes” se le asigna dos
satélites, o “Subcontinentes”, que totalizan doce; a este
respecto, el número doce simboliza probablemente al número doce
cabalístico, que tiene conexión con los doce signos del Zodiaco.
78.-
Estos son el corazón, los pulmones, el hígado, los riñones y el
bazo.
79.-
Luego de haber absorbido mentalmente el círculo de ofrendas, o el
mandala, visualizado conforme a las directivas dadas, el yogin
debe permanecer en el estado de no dualidad, que es, el estado del
samádhi, en el que todo dualismo se percibe como si estuviese
en unidad. En otras palabras, debe comprender a Todos en Uno y el
Uno en Todos.
5.
La fiesta mixta, roja y negra.
Si se incorporan al manuscrito
mas pequeño, que carece de ellas, las siguientes instrucciones, en
cuanto a las diversas formas en que pueden aplicarse el ritual, estarían
después de la estrofa que contiene los mantras tri-silábicos. Sin
embargo el manuscrito más pequeño, por haber sido escrito para
exponer tan sólo el Rito de la Fiesta Blanca, fue conformado,
esencialmente, por los altos ideales altruistas del budismo
mahayánico, mientras que en el manuscrito más grande, el animismo
primitivo parece haber sido modificado menos.
“Si [deseas] hacer del
ritual una Fiesta Mixta, produce
mentalmente, del cadáver80,
paquetes y jardines,
alimentos y vestidos, y medicamentos,
de acuerdo con tus deseos, y
multiplicarlos y trasmútalos81,
“Para emplear el ritual como
Fiesta Roja, imagínate como
si fueses la Negra
Iracunda82.
Y que te arrancas la piel
del cuerpo, que constituye
las heces del egoísmo,
y la esparces de modo tal
que cubra el Tercer Vacío Universo83,
amontonando sobre ella la
carne y la sangre y los huesos
de tu cuerpo agregado,
y que la piel entonces
parezca una carnicería84.
“Cuando el ritual se emplea
como Fiesta Negra consiste [en
aplicar el karma
malo] de todos los seres sensibles, incluyéndote,
en juntar todas las
enfermedades y maldad causadas por los malos
espíritus desde el tiempo
sin principio–
las infracciones y
oscurecimientos [de todos los seres sensibles]
son [visualizadas] en forma
de nubes negras
y absorberlo todo en tu
propio cuerpo;
y luego, en pensar que tu
cuerpo, tras ser devorado por los
duendes y los malos
espíritus,
toma sus coloridos cuerpos,
en negrura de carbón85”.
80.-
Es sobre el cuerpo, visualizado como cadáver, que se recitan los
mantras y se
produce esta visualización subsidiaria. A veces, sin embargo, se
usa como base de la visualización un cadáver real.
81.-
La transmutación ha de ser ya en amrita o en objetos
celestiales de goce, que luego se ofrecen a los duendes y demonios a
fin de volverlos propicios y, de ese modo, obstaren su ayuda para
incrementar el mérito. Este rito lo realizan a menudo lamas de
mentalidad mundana, ya sea por su propio beneficio, o el de laicos,
para aumentar la “prosperidad mundana”. La creencia popular que
se le refiere consiste en que consagrando de ese modo los
visualizados “parques y jardines, alimentos y vestidos, y
medicamentos” a los dioses, aquél que realiza el rito,
eventualmente, lo consagrará aquí en la Tierra.
82.-
Texto: Tö-nag-ma, “Negra Iracunda”(o Diosa)”. Esta
Diosa, de la clase de las Iracundas (tibetano: To-wo) está
calificada como “negra”debido a su iracunda apariencia. En
realidad es de color rojo, en correspondencia en Vajradakini, de la
cual es el aspecto iracundo; todas las deidades de si Orden Tántrico
tienen los dos aspectos, a saber, el de pacífica y el iracundo.
83.-
El Universo como si estuviese compuesto por “Las Tres Regiones”.
84.-
Esta parte de la visualización tiene por finalidad tomar las
imágenes mentales lo más claras posible, y por lo tanto, más
efectivas; pues la Fiesta Roja se emplea comúnmente para exorcizar
personas y lugares de malos espíritus.
85.-
Este notable rito de visualización, llamado Rito de la Fiesta
Negra,se emplea para la absolución del karma malo, y también como
exorcismo para la curación de enfermedades humanas. En directo
contraste, el Rito de la Fiesta Blanca, como el que contiene el
manuscrito más pequeño y se ofrece en su turno, añadió, les
llegará la oportunidad de trasferir todos esos ninguna finalidad
egoísta o mundana, con el único propósito de ayudar al yogin
a captar la no realidad, del yo personal, o ego. Aquí resulta
nuevamente muy relevante –en el manuscrito más grande– el
animismo prebúdico, más o menos de conformación Bön. Sobre los
duendes y malos espíritus , al igual que sobre el macho cabrío, se
descargan las transgresiones y enfermedades de todos los seres
sensibles, acumulados durante siglos. Este aparente injustificable
trato dado a los duendes y malos espíritus fue explicado por el lama
como si fuese nada más que sus kármicos desiertos. “Y a
ellos, en su turno”, añadió, “les llegará la oportunidad de
transferir todos esas transgresiones y enfermedades, junto con su
propio karma malo, a Yama el Señor del Mundo Inferior, que
consume y así destruye la Ignorancia y Oscuridad del Sangsára”.
Esto parece un modo simbólico de explicar que todas las cosas
vivientes deben eventualmente alcanzar la Liberación, y que el Mal
será ingerido por el Bien –doctrina aparentemente común a la
vieja Fe Bön y al Budismo. Esto se clarifica más con la otra
referencia al Rito de la Fiesta Negra.
Dr.Walter Yeeling Evans-Wentz, editor.
Kazi Dawa Samdup, traductor.
Los méritos son ofrecidos a todos los seres para que
alcancen la Iluminación en esta vida.
Qué todos los seres sean felices.
Qué se liberen del sufrimiento.
Qué no se separen nunca de la felicidad.
Qué permanezcan en la gran ecuanimida
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