YOGA TIBETANO y DOCTRINAS SECRETAS. LIBRO III. CAPITULO 5: LA DOCTRINA DEL ESTADO POST-MORTEM. PARTE 1: REALIZACIÓN DEL ESTADO DE LA CLARA LUZ DEL DHARMAKÁYA DURANTE EL BARDO. El Bardo de los momentos de la muerte. El arte yóguico de morir.
CAPITULO 5: LA DOCTRINA
DEL ESTADO POST-MORTEM.
1) La quinta doctrina, el
Bardo, consiste en estas tres partes: primera Realización194
del Estado de la Clara Luz del Dharmakáya [o cuerpo divino de
la verdad, [o
cuerpo absoluto] durante el Bardo; segunda
Realización del Estado del Sambhogakáya [o cuerpo divino del
don perfecto, [o
cuerpo de gozo] durante el Bardo; tercera
Realización del Estado del Nirmanakáya [o cuerpo divino de
la encarnación, [o
cuerpo de aparición], durante el Bardo195
[o asumir el nacimiento como Tulku196].
194.-
En este contexto “realización” implica, además de su sentido
ordinario, el hacer correcto uso de esa preparación yóguica
como la efectuada en el mundo humano por los difuntos antes de morir.
195.- Para el yogin
común, no iluminado plenamente, la primera de estas realizaciones
Post-Mortem, consiste en un éxtatsis vislumbre de la Verdad Última;
la segunda, en la limitada experiencia de la dicha Bodhisáttvica; la
la tercera, en el logro del divinamente dotado renacimiento en la
tierra.
196.-
Texto: Tulku, i. e. divinamente encarnado como el Dalai Lama,
que es el Tulku de Chenrezig (sánscrito
Avalokitesvara) , “El Que Contempla [con Piedad], la
corporación de la misericordia, o, compasión conocido como “El
Gran Compasivo” [señor
que mira desde las alturas]
o como el Tashi Lama, Tulku de Od-dpag-med (sánscrito:
Amitábha, “El de la Luz Infinita”) el Buda e Ilumina o
Esclarece. La interpretación de la palabra Avalokitesvara, según
E. T. Sturdy, es la siguiente: “Avalokita = visto; Ishvara
= señor; de modo que Avalokitesvara es el Señor Que es visto
[dentro]. Esta versión se ajusta más a lo que implica el sánscrito
que la más popular ofrecida arriba. “Avalokitesvara es, en
este sentido, sinónimo del Chistos por dentro.
PARTE 1: REALIZACIÓN DEL
ESTADO DE LA CLARA LUZ DEL DHARMAKÁYA DURANTE EL BARDO.
2) La primera parte,
Realización del Estado de la -clara Luz del Dharmakáya
durante el Bardo, ha sido expresada como sigue:
“La Luz mengua y lo
Burdo [lo
grosero], mengua197,
los Pensamientos
menguan y lo Sutil198 mengua;
tras el menguar llega
el estar en casa.
Entonces aparece la
Clara Luz Primera,
y tras ese amanecer,
los Dos Cuerpos como Uno199”.
“Del Conocimiento
Enseñado y No-enseñado,
la unión de lo
Enseñado y lo No-enseñado
ha sido llamado el
Logro del Fruto”.
3) La muerte precede al Bardo.
4) El Bardo está
simbolizado por un cielo de otoño sin nubes.
5) La Luz, la Ignición, y el
Logro, determinan, en el momento de la muerte, los límites del
Bardo200.
6) El reconocimiento de la
Clara Luz ha de cumplirse en el intervalo entre la cesación de la
conciencia en este mundo y el surgimiento de la conciencia en el
estado Post-Mortem; y la clara Luz ha de utilizarse en el Camino
mediante la aplicación de las enseñanzas escogidas, para combinar
en uno solo el Camino y el Estado Verdadero de la mente201.
197.-
La Luz es aquí la del mundo común, al morir, su presencia se
desvanece. Lo Burdo [lo
grosero] es
el cuerpo físico y su respiración.
198.-
Lo Sutil es la conciencia humana que temporalmente cesa de funcionar,
ocasionando en el caso de una persona normal, o de quien no se ha
desarrollado yóguicamente antes de morir, un periodo de
inconsciencia, que dura unos tres días y medio, (o cuatro),
inmediatamente después de completarse el proceso de la muerte.
Cuando el difunto recobra la conciencia, al concluir este periodo se
empieza a sentir en casa en el Bardo, habiendo atravesado, mientras
estaba inconsciente, el estado que precede al nacimiento en el mundo
post-mortem que es paralelo, al estado embrional que precede al
nacimiento, desde el Bardo, en el mundo humano.
199.-
La Clara Luz Madre y la Clara Luz Resultante se funde en Uno, en el
divino cuerpo del Don Perfecto, el Sambhogakáya, que
simboliza su unidad.
200.-
La Luz simboliza la claridad superior del poder visual que llega como
primera experiencia consciente del estado post-mortem; la duración
de esta experiencia inicial se llama Ignición, pues simboliza la
combustión, o despertar de la divina conciencia innata por medio de
la Luz; y el Logro se refiere al beneficio espiritual alcanzado al
experimente la muerte. El grado del Logro depende por completo del
karma de difunto. El estudioso no debe dejar de remitirse a El
Libro Tibetano de los Muertos, que contiene un amplio y
autorizado comentario sobre nuestro texto.
201.-
El desarrollo espiritual del yogin ha de ser de tal modo dirigido
mediante las selectas enseñanzas del gurú que, en el momento
de morir, posea el poder yóguico de pasar de este mundo al estado
post-mortem sin ininterrumpir la continuidad de su conciencia. Por
este medio, al eludir la inconsciencia experimentada por la persona
que muere sin esa percepción yóguica, estará en condición de
combinar el Verdadero Estado de la mente, como el que se experimenta
en la quietud samádhica (a la que se acostumbró estando en
el cuerpo y en la que mora al morir) con el Verdadero Estado de la
Mente, similar al experimentado extáticamente por el maestro de yoga
en circunstancias en que percibe la Clara Luz en el Bardo. En virtud
de este gran logro, podrá conocer, con carácter de real percepción
superior, que tanto el estado de la existencia encrnada en el mundo
humano como el estado de la existencia desencarnada en el mundo
bárdico, que esencialmente iguales, transitorios e ilusorios;
y que el Verdadero Estado de la mente, independiente de ambos estados
sangsáricos, no es transitorio. Ni ilusorio, sino el Estado del
Morador del Real, del No-Hecho Nirvánico. Alcanzar esta suprema
realización es alcanzar el Estado Búdico.
[El Bardo de los
momentos de la muerte]
7) En otras palabras, cuando
la fuerza vital de los cinco sentidos [agregados],
incluso la vista, se sumerge, simultáneamente el conocimiento de la
forma y todas la cosas objetivas se sumergen. Esto se conoce como el
Sumergimiento de la Luz202 [o de la Percepción de
las Cosas vistas en la Luz de este Mundo].
8) Entonces la tierra se
sumerge en el agua; el cuerpo pierde su sostén [o poder de
coherencia como unidad de materia orgánica].
9) Entonces el agua se sumerge
en el fuego; la boca y la nariz se vuelven áridas y resecas.
10) Entonces el fuego se
sumerge en el aire [como fuerza vital]; el calor desaparece [del
cuerpo].
11) Entonces el aire [como
fuerza vital] se sumerge en la conciencia [o éter203].
12) Luego, los de karma
negativo, experimentan las angustias del momento de la muerte.
13) Y a los que han realizado
buenas acciones, los devas y gurús y las dakinis llevan a buen
fin204.
14) Con la última expiración
llega la disminución de lo Burdo [lo
grosero].
15) Luego durante la primera
parte del tiempo de duración [i. e. entre el cese de la respiración
y la salida de la conciencia] de la respiración interna [o
vitalidad] llegan las etapas de disminución del conocimiento. Los
signos que se perciben exteriormente [por parte de la persona que
muere] se parecen al brillo de la luna; los que se perciben
internamente se parecen al humo [que oscurece mentalmente]. Este es
el tiempo de la aparición de la luz [del momento de la muerte205].
16) Estos signos se funden en
la Ignición [i. e. el período de duración de las experiencias del
momento de la muerte]. Cesan los treinta y tres impulsos de la
ira206; el signo externo de esto se parece al
brillo del sol, el signo interno, a aparentes luciérnagas. Este es
el tiempo de la Ignición.
17) El tiempo de la Ignición
se sumerge en el tiempo del Logro Inmediato. Cesan los cuarenta
impulsos del deseo; el signo externo de esto se parece a una línea
de oscuridad o Rahu207 [que eclipsa el sol],
el signo interno a la luz de una lámpara encerrada en un vaso opaco.
Estas apariencias significan [la etapa del momento de morir conocida
como] el Logro Inmediato.
18) El estado del Logro
Inmediato se funde en el estado de la Clara Luz. Cesan los siete
impulsos de la Ignorancia208. Entonces llega la
disminución de la Sutil. Los signos externos se parecen al brillo
del crepúsculo; los signos internos a un cielo otoñal sin nubes.
Este es el cuarto período de la Clara Luz209.
19) Las experiencias iniciales
coincidentes con el proceso de la muerte al ser las principales en el
conocimiento del Bardo, hace que quienes han practicado las
enseñanzas escogidas llamen a la etapa ahora alcanzada el Primer
Bardo [también conocido como el Chikhai Bardo, o el Bardo
de los Momentos de la Muerte (o
Bardo doloroso del momento de la muerte)].
202.-
Texto: Nang-wa = “luz”, también “lo visto
a la luz”. En tibetano no hay sino una sola palabra para expresar
concepto similares pero tan diferentes como estos: 1) luz en su
aspecto ordinario; 2) cosas vistas por medio de la luz; y 3) cosas
vistas mentalmente por medio de ojo de la mente. Asimismo, la
atmósfera como medio de transmisión de la luz se conoce como
nangwa. Para la Clara Luz misma existe el término Od-sal.
203.- Estos pasajes
ilustran de forma adicional la bien conocida concepción filosófica
común en la India, al igual que en la Grecia clásica, de que el
cuerpo humano es una combinación de los cinco elementos [agregados].
En nuestro texto, la tierra representa las porciones carnales del
cuerpo y los huesos; el agua, la sangre y otros fluidos; el fuego, el
calor animal; el aire, las fuerzas vitales; y el éter, la
concienica.
204.-
Los gurús divinos, o superhumanos, tienen el poder de dirigir de esa
manera el avance post-mortem del discípulo, tal vez no
suficientemente evolucionado en lo espiritual para orientarse por sí,
y que está facultado a tomar nacimiento sin demora en una familia
que le proporciona las condiciones convenientes para continuar su
marcha por el Camino desde el punto en que se detuvo por la muerte.
205.-
El moribundo percibe los signos externos como blanco resplandor de
luz lunar en su alderredor. Existen constancias de que europeos, con
espiritualidad superior a la ordinaria, expresaron, antes de la
consumación final del proceso de la muerte, exclamaciones extáticas
tales como: “¡Luz!”, “'Más Luz!”, “'Ahora aparece la
Luz!”, y algunos, ignorando la naturaleza de la Luz, pensaron, que
entraban en el Cielo. Este fenómeno nace de los cambios
psico-físicos de la facultad de la visión producidas por el proceso
de la muerte. De modo parecido, los signos internos, la alucinación
mental o las apariciones imprecisas, son producidas por las mismas
mutaciones psico-físicas que afectan la mentalidad.
206.-
Estos, y los cuarenta impulsos mencionados abajo, representan los
diversos aspectos en los que la ira y el deseo están divididos de
acuerdo con la filosofía de la Gran Escuela Perfeccionista
[Dzogchen]
de Padmasambhava.
207.-
Rahu (o la cabeza del dragón) es una representación
mitológica de la una cuando produce una eclipse de sol.
208.-
Esto es, la ignorancia mentalmente ofuscadora conocida en sánscrito
como Avidyá.
209.-
Poco a poco, a través de las cuatro etapas, la Clara Luz se
aproximó; y esto hace que nuestra Doctrina del Bardo sea una
continuación de la Doctrina de la Clara Luz.
[El arte yóguico de
morir]
20) Las prácticas en esta
etapa son las que siguen.
21) Cuando estés por morir,
erradica todo el barullo del apego [al mundo y las posesiones
mundanas], junto con el odio [hacia cualquier enemigo u otra persona
que dejes atrás].
22) Al dejar que la mente
descanse libre de la formación de pensamientos durante las etapas
del proceso de disminución, las experiencias de éste se funden de
modo acorde con el estado natural de quietud tan pronto han
aparecido. De ese modo surge la clara Luz Resultante.
23) Luego, como producto
secundario, surge la Clara Luz Madre, la Clara Luz cuarta210.
24) El reconocimiento
intelectual de estos dos aspectos de la Clara Luz, al ser similar al
reconocimiento resultante del encuentro cin un viejo conocido [dado
que la muerte fue previamente experimentada muchas veces], se conoce
como la Unión de la Clara Luz Madre y la Clara Luz Hija.
25) Al morar en el estado de
la Clara Luz tanto cuanto se desea y surgir luego de ella en el
cuerpo de las divinas Claras Luces unidas, en virtud del triple
proceso reversivo211, y transferir la conciencia, a
través de la Abertura de Bráhma, en la coronilla, quien es adepto
[en el yoga de la transferencia de la conciencia]. Quien es
más débil en la práctica se convierte en Poseedor del Dorje en
alguno de los estados del décimo grado212 [de los
supremos bodhisattvas celestiales].
210.-
Así como una madre no lo es hasta que da a luz un hijo, de igual
modo la Clara Luz Madre surge lógicamente tras la del Vástago.
También se conoce esto como el cuarto grado del Vacío de la Clara
Luz.
211.-
Este difícil proceso yóguico puede describirse así: En el
momento que precede inmediatamente a la muerte, como lo explica el
texto, brilla una blanca luz, luego como de luna [roja], como la del
sol, y después llega la oscuridad. En el orden inverso de su
aparición el yogin debe disipar mentalmente una tras otra
–oscuridad, luz roja y luz blanca. Paralelamente debe proyectar
retrospectivamente en un esfuerzo consciente, en una panorámica
revisión post-mortem del proceso de la muerte cada uno de los
estados experimentados durante el fallecimiento. Estos son: el
estado de la Clara Luz cuarta; 2) la disminución de los Sutil; 3) la
disminución de lo Burdo. Al hallarse en cada uno de estos estados
revistos en orden inverso, el yogin ha de mantener un
pensamiento correspondiente. De esa manera, en el primero, el
pensamiento ha de ser: “¿Dónde estoy?”; en el segundo: “¿Quien
soy?”; y en el tercer: “¿Cual es la condición en la que
estoy?”. Luego, habiendo dominado este proceso yóguico, procede a
emplear el yoga de la transferencia de la conciencia, llamado
en tibetano Powa, que es el tema de nuestro próximo Libro.
Si es adepto de Powa, la conciencia se aleja del cuerpo a
través de la Abertura de Brahma (sánscrito: Brahmarandha),
que forma la salida del nervio medio, antes que a través de una de
las nueve aberturas externas del cuerpo, descritas en la nota del
párrafo 30 que sigue.
212.- Chö-kyi-tin,
sánscrito: Dharma-Megha, “Nube de la Verdad”, nombre dado a los
estados del décimo grado del supremo cielo sangsárico conocido en
tibetano como “Ogmin” (Omin), que significa “No abajo”,
el reino del que no se cae. El término “Poseedor del Dorje”
símbolo místico del poder superior, tiene principalmente
referencia, como aquí, con el Originador Espiritual, o Inspirador
Divino, de la doctrina tántrica que enseña el camino de la
Emanciación.
Dr.Walter Yeeling Evans-Wentz, editor.
Kazi Dawa Samdup, traductor.
Los méritos son ofrecidos a todos los seres para que
alcancen la Iluminación en esta vida.
Qué todos los seres sean felices.
Qué se liberen del sufrimiento.
Qué no se separen nunca de la felicidad.
Qué permanezcan en la gran ecuanimida
Comentarios
Publicar un comentario